SpaCreativo Santa Fe
No tengo recursos para tramitar lo que pasó. Se desborda como un río de emociones todo lo que siento. Intento calmarme. No puedo. Intento que baje la marea, sigo obnubilado. Quizás necesite volver a mis letras y seguir escribiendo.
Miro las fotos del evento, leo algunos comentarios, comienzo a escuchar algunos audios por whatsapp del fin de semana y me atrapa la nostalgia. Pero como dice mi carta número 11, debo intentar superar una vez mas, mi conflicto con la nostalgia.
Llegamos cerca de las 10 al Paraninfo.
Mientras subíamos por las escaleras y en el pasillo, conocimos a Sofía. Estábamos caminando con Omar Darío y Patricio. Sofía nos contó que una amiga la invitó. Le preguntamos a qué se dedicaba. Estudiante, nos dijo.
Pato no pudo con su genio y le contó que yo fui el de la idea. Sonreímos y seguimos caminando juntos. Su sonrisa ya había pagado todo mi esfuerzo.
Al llegar vimos una mesa preciosa llena de lindos libros.
Fuimos caminando hasta adelante y comenzamos a saludarnos. La esperanza se podía palpar como el sol de una fresca brisa de invierno. Las miradas cómplices entre los asistentes. Los mates que iban y venían.
Terminamos de ultimar detalles con la presentación, el sonido, el audio, el video, la banda musical compuesta por Rodrigo, Juan y Damian, ya estaban tirando acordes.
La primera fila estaba completa.
La capacidad de asombro habitaba como la neblina en la madrugada de una ruta desértica. Y fue entonces cuando mi amiga Selva Digiorgio tomó la palabra y con su desbordante energia, su preciosa sonrisa y su cálida mirada, abrió el SpaCreativo.
¿Quién es Selva? Selva es docente formadora de mediadores, coordina el Cecamarco, que es el departamento de Mediación de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Nacional del Litoral.
Pero lo mas lindo que conocí de Selva es que supo esperarme. Supo demorar su agenda y aguardarme en un cafe. No creo que haya muchas Selvas, en tiempos tan impacientes.
La eferveciencia y la velocidad ahoga cualquier tipo de conexión. Por eso quiero tanto a Selva y amo encontrarme en un café con ella. Su calidez enamora. Ella es la piedra fundamental de todo lo que ahora vamos a vivir en SpaCreativo Santa Fe en la Universidad Nacional del Litoral.
Luego de su apertura, quiero hacer una pausa y hablar de ella. Karina Marino. Casi todos los días, ella me preguntó ¿Cómo estas? Si, durante los últimos 60 días, casi todos días estuvo a mi lado con un mensajito de WhatsApp.
Los ojos de Karina lo dicen todo. Ella supo acompañarme, aconsejarme, sostenerme y sobretodo, contenerme en aquellos días que quería mandar a freir churros a alguien. Es un honor para mi, que Karina esté a bordo del Dream Team SpaCreativo.
Comencé yo.
En pocos minutos intenté hablar de las 3 ventanas de la conciliación. ¿Lo habré logrado? No lo sé. Por algunas miradas que pude observar mientras hablaba, me entusiasmé y describí la ventana del oído, la ventana de la palabra y la ventana del corazón.
Llevé todos los libros que de alguna manera, pudieron iluminar mi mirada conciliadora y los fui regalando. Mi conferencia tuvo como eje movilizar a la audiencia a formalizar tres búsquedas.
Escuchar, percibir, sentir, conectar.
Luego hablé sobre la ventana de la palabra. Sobre la necesidad que existe desde el día que nacemos. Todos tenemos la obligación de verbalizar lo que sentimos. Pero diferentes mandatos sociales han anulado nuestra voz. Por eso me he dedicado en éstos últimos meses a dar la palabra, como así también yo mismo comencé a decir lo que sentía. Soltar sin prejuicios nuestras emociones.
Finalmente hablé sobre la ventana mas difícil de abrir. Esa ventana que puede lastimarnos muy severamente. La ventana del corazón.
Es que amar es correr el riesgo de darle tu corazón a una persona y que te lo devuelva cuando no lo quiere.
Por eso hay tantos corazones rotos caminando por las calles. Por eso escribí dos cuentos. Por eso publiqué la segunda edición de mi libro a un dolar. Aquí pueden comprarlo. Hay un grito desesperado en mi corazón por despertar a tantos que viven en piloto automático. Hay una pasión que me desborda por abrazar, encontrar y movilizar a otros para que se pongan en la brecha del conflicto. Que se animen a cambiar el mundo de la resolución de conflictos.
Luego subió Joe Taylor y Alfonso Guevara.
Los dos leones que llegaron a mi vida para quedarse para siempre. Dos heroes de la fe que me acompañaron a bordo de ésta gran aventura. Joe hablando en ingles. Alfonso como traductor. Creo que ellos se encontraron y que la audiencia santafesina pudo disfrutar de ese encuentro.
Joe nos contó de Unleash God´s Dreams for your life — Argentina. Nos movilizó a encontrar el propósito de Dios para nuestras vidas. Joe viajó con su dulce esposa Cynthia. Que placer tenerlos a bordo de este precioso viaje. Los amo profundamente. Gracias por estar conmigo.
Luego subió al escenario el Dr. Guillermo Gonzalez Moreno. Nos habló de negociación. Nos rompió la cabeza. Nos mostró su manera de gestionar un conflicto. Conocer para resolver.
Guillermo animó a Patricio a que viaje. Fue increíble. Su conferencia, su mirada aguda y su pasión por gestionar, iluminó a la audiencia santafesina.
Con algunos ejemplos prácticos de gestión nos abrió juego al cómo se pueden resolver los conflictos y seguramente tendré que volver a escuchar su conferencia para subrayar los puntos mas importantes.
Guillermo hoy es Director Delegado de la Dirección Provincial de Relaciones Laborales ante el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia de Buenos Aires.
Después le llegó el turno a Leonel Groisman, uruguayo. El jugaba de local. La audiencia santafesina ya lo conocía. Gracias a Leonel y su amistad con Selva, pudimos llegar a la Uni.
Leonel fue muy práctico, conciso y al hueso. Nos dió ejemplos muy interesantes sobre cómo muchas veces actuamos en contra de nuestros intereses. Nos enojamos con aquellos que pueden gestionar nuestros conflictos, anulando así la posibilidad de resolverlos.
Después llegó ella.
Su inconfundible voz. Su mirada aguda. Su capacidad de conectar es abrazadora. MaryJo nos habló de tantas cosas y nos hizo reflexionar sobre nuestros relatos, sobre Freud y sobre el inconciente. El yo y otras cosas que requerirán un tiempo para digerir tantas ideas tan profundas.
Luego llegó el.
Ya lo conocen, no necesita ninguna presentación. Ah si… y fue por eso que para presentarlo hice algo fuera de programa.
¿Qué hice?
Me fui al piano y toqué 4 acordes. Justo cuando estaba a punto de arrancar a cantar, agarré el micrófono y comencé a describir a Luciano.
Necesitaba música.
Luciano es valiente. Luciano nos abrió su corazón. Cautivó a toda la audiencia santafesina. Sus 27 minutos fueron increíbles. Nadie se movió de su asiento. Hubo lágrimas, hubo encuentros.
Fue entonces cuando tomé una decisión.
Teníamos que darle un respiro y fue entonces, que los convoqué a una reunión urgente. Sus rostros lo dicen todo. Yo estaba totalmente concentrado. Necesitaba cantar una canción. Sorprender.
No te vamos a dejar hacerlo. No podes cortar la línea de inspiración Jorge, me decían. Hice todo lo contrario.
Y me dejé llevar por esos acordes, cantando Color Esperanza.
Necesitaba cantar, necesitaba gritar mis agudos, desafinar un poco de vez en cuando, hace bien al alma. Lo hice.
Luego llego mi primo. Amé vivir con el éstos días. Es médico, cirujano, flebólogo, y mi hermano del alma.
Pero todavía faltaba lo mejor. Omar Dario, Claudio y Alfonso todavía no habían salido a la cancha y tenían mucho por compartir.
Omar Darío nos iluminó con su experiencia de vida. Nos contó como se capacitó en Córdoba, trabajó en Buenos y fue feliz en Santa Fe. Su historia, sus viajes, sus encuentros. Fue muy breve, pero nos abrió su corazón. Fue mas que suficiente.
Luego llegó alguien santafesino de pura cepa.
Claudio Bermudez jugó de local y la clavó en el ángulo. El nos invitó a repensar el valor de la mediación. Habló de normas, leyes y de cómo un tercero neutral puede ser tremendamente efectivo en la solución de un conflicto.
Hablar con Claudio me da paz. Así lo presenté. El no necesita presentación, no necesito decir que es profe, juez, amigo y apasionado por la mediación.
El nos invitó a una reflexión muy profunda sobre cómo sentir la mediación.
Volví a subir a la plataforma para contar los 2 momentos mas trístes que tuve éste año. El primero fue el lunes 8 de abril, el día que nació SpaCreativo. El segundo fue el 19 de mayo, el día que lo llamé a Alfonso Guevara y me abrazó con confortable voz.
Con una clase magistral sobre las dimenciones del amor De Dios, el pastor Alfonso Guevara, nos abrió juego a conocer su misión en la vida. Alfonso es autor de dos libros, Pastores de Carne y Hueso — La vida del pastor.
Alfonso nos invitó a reflexionar sobre cómo podemos gestionar los conflictos del corazón humano. Nos movilizó, nos cautivó y nos llevó a sentir el amor de Dios.
Fue tan intensa toda la jornada que nos olvidamos de decir que habíamos llevado libros para vender. Sólo me preocupé por regalar gran parte de los libros de mi biblioteca como Mediador.
Creo haber dejado todo en mi amada Santa Fe.
Prometo volver pronto.
Los amo.